La creatividad aflora desde estos símbolos tan abstractos que, en segundos,
con un dispositivo móvil, recobran
todo su sentido. Y es que si esta herramienta tiene algún límite, éste se basa
en lo ilimitado.
La capital de Portugal
es un ejemplo de innovación y originalidad, de cómo se le puede sacar
el máximo partido a estos códigos. Han inventado una ruta urbana que los
turistas pueden seguir para recorrer Lisboa y pasar por todos sus rincones gracias a los códigos QR que han colocado, ni más ni
menos, que en forma de mosaicos en el suelo de la ciudad.
Así, cualquier viajero
que disponga de un smartphone y una aplicación que permita leer estos
códigos, obtendrá información de interés para su visita además de sugerencias
sobre comercios y restaurantes.
Aunque sólo parezca
una forma de diversión, los códigos QR son en realidad una buena manera de
atraer la atención de tus usuarios y
convertir experiencias que en un principio eran offline en online.
Un QR Code (Quick Response) es un sistema
donde se almacena cualquier tipo de información, ofreciéndonos miles de
posibilidades de promover las actividades, ofertas y noticias de tu negocio.
¿Dónde puedes colocar un código QR? En la etiqueta
de un producto para añadir algún aspecto sobre el producto o la marca, en
el escaparate de una tienda para que
puedan acceder al catálogo; en un restaurante
para incluir detalles como el teléfono de contacto, en el transporte público para rematar el tiempo de espera, en ferias o conferencias; en tarjetas de
visita para ampliar información sobre nuestra tienda, en paneles publicitarios o en redes sociales. Y la última, también
puedes colocarlos en el cementerio.
En Japón ya se pueden ver algunas lápidas con sus códigos.
Gracias a su 30% de
tolerancia en legibilidad, este sistema para almacenar información admite diseños muy creativos y atractivos para
aquellos que se los encuentran. Fíjate en esta galeríade imágenes . ¡No
dejarás de sorprenderte!
El uso de esta herramienta ha aumentado
considerablemente en los últimos meses. Sin embargo, hay que tener una razón
para utilizarlos y para ello es necesario estar seguro de seguir una buena estrategia de marketing. Dale al
usuario un motivo para escanear el
código, dótale de un valor añadido, más allá de que sea una herramienta de
moda, adapta la página de destino a un dispositivo
móvil y comprueba el buen funcionamiento de tus campañas.
Creativamente, casi no
tiene límites. ¡Asegúrate de que
profesionalmente sí los tenga!
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